Myriam Levy-Chernoff

'Al Señor presta el que da al pobre, y el bien que ha hecho, se lo volverá a pagar'.

Proverbios 19:17

Hace tan solo una semana que regresamos de Israel, nuestra estancia fue de 13 días, que se pasaron ‘volando’, por lo que no perdimos oportunidad tratando de administrar lo mejor posible nuestro tiempo en trabajar en la obra del Señor.

     Mi esposo, Joel Chernoff, es el fundador y director de Joseph Project (fundado en 1996). Para aquellos lectores que no tienen ningún antecedente, les comento que desde el año 2000, Joseph Project se ha convertido en uno de los principales importadores y distribuidores de ayuda humanitaria en Israel. Hemos dona-do más de $120 millones de dólares en ayuda a servicios sociales, hospitales, centros de sobrevivientes del holocausto, bancos de ali-mentos, orfanatos, y más. Actualmente el al-macén está ubicado en el centro de las coli-nas que rodean Jerusalén (Beth Shemesh).

     Retomando el tema de nuestro viaje a Israel, y debido a que no cuento con mucho espacio, me limitaré a compartir brevemente algunas de las actividades que realizamos mi esposo Joel y yo.

     El 5 de diciembre de 2022, Joseph Project y Culanu organizaron un evento en Kiryat Gat, donde se convocó aproximadamente a 150 familias de las comunidades etíope y de Ucrania, la mayoría de ellos son nuevos inmigrantes y tienen necesidad de las cosas más elementales en un hogar. La jor-nada fue de 10.00 a.m. a 6.00 p.m. y se donaron muebles de sala nuevos, mesas de TV, bastones, andaderas y pañales para adultos.

El 6 de diciembre trabajamos todo el día en Jerusalén con Sandy Shoshani, Directora Nacional de ‘Be’ad Chaim’ (que por cierto en esta misma revista encontraras una entrevista que le hice). Ella nos llevó al barrio ultraortodoxo “Mea Shearim” a visitar a un matrimonio con nueve hijos. La mujer trabaja haciendo limpieza y su esposo, además de estudiar en la yeshivá trabaja como moel, pero los moel allí no cobran, solamente reciben alguna aportación voluntaria de quienes quieren y pueden hacerlo. Ellos viven en un departamento muy pequeñito de 2 recámaras, cocina, un baño y un patio pequeño. No tenían camas para todos los miembros de la familia, por lo que les entregamos camas nuevas y un gabinete nuevo de Ikea para que puedan almacenar sus víveres.

     Después nos fuimos a visitar a Rhona, una joven madre con muchas situaciones emocionales difíciles que requieren de mucha terapia, su esposo está en la cárcel y ella vive con sus 2 hijitos (un niño de 4 y una niña de 1); circunstancias por demás duras que le dificultan completar el pago de la renta, por lo que  gracias a nuestra querida amiga Sandy Shoshani y Be’ad Chaim le ofrecieron ayu-darla a completar el pago de la renta y evitar que esta familia termine en la calle; ayuda que servirá para que pronto Rhona  pronto vuelva a incorporarse a una vida independiente, mientras tanto ella vive con su hermana que también conocí y se ve que lamentablemente fue afectada por las drogas, su personalidad y físico lo pueden atestiguar! (cuánto dolor y sufrimiento queridos amigos, todo a causa del pecado, de la ausencia de D-os en las familias).

      Rhona recibió de Joseph Project unos muebles de sala y una lavadora, y veamos el milagro y la provisión Divina, ya que la suya, se había descompuesto un día antes, por lo que estaba impactada hasta las lágrimas.

    El 8 de diciembre (2022), trabajamos todo el día con Miriam Winograd, quien es miembro de la junta directiva de J.P. y ella nos coordinó varias visitas.

     Temprano por la mañana, Joseph Project brindó también ayuda humanitaria a recientes inmigrantes de Ucrania y Rusia a través de la asociación "Canasta generosa" en su Centro de distribución en Tel Aviv. Se obsequiaron los siguientes artículos, todos nuevos: abrigos, cobijas y sábanas.

    Ese mismo día, nos fuimos a visitar a una familia de refugiados que huyeron de Rusia hace tan solo mes y medio, esta familia que consta de Tenesha, una joven y valiente madre judía, sus tres hijos de 9, 12 y 16 años y la abuelita. Tenesha, es una mujer muy trabajadora y administrada con sus recursos, estuvo ahorrando lo más que pudo de lo que ganaba en su trabajo, hasta que decidió que era hora de huir de Rusia antes de que fuera demasiado tarde!

     Debido a que la embajada de Israel se encuentra cerrada en Rusia, compró los boletos de avión para ella y su familia y viajaron con visa de turista. Una vez que ingresaron a Israel, rentó un departamento (sin muebles, camas, etc.) y se fue inmediatamente a tramitar su aliyá, que para su gran alegría, justamente dos días antes de visitarla recibió su documentación oficial, como nueva inmi-grante israelí! Pero mientras tanto, se le han ido agotando los pocos recursos, quedando apenas una limitada reserva, tan es así, que Tenesha le preguntó a Miriam Winograd si nos tenía que ofrecer algo de comer o beber, ya que no tenía nada que ofrecernos, eso nos conmovió muchísimo! Les comparto que tuvimos la alegría de poder entregar a esta familia: camas, sábanas, cobijas, 4 abrigos y una lavadora (todo nuevo). Aunque viví esta experiencia, ¡les confieso que al escribir estas líneas, mis ojos se llenaron de nuevo de lágrimas al recordar todo esto.

     Ya por último, en ese día concluimos y como decimos en México “terminamos con broche de oro” al visitar a una sobreviviente del Holocausto originaria de Ucrania, su nombre es Ida, y mi esposo Joel Chernoff le entregó a Ida a nombre de Joseph Project una hermosa canasta con diversos obse-quios. Nos invitó con amorosa hospitalidad a pasar a su departamento y nos compartió su impresionante historia, ella ya tenía lista una bolsa con ‘las fotos del recuerdo’ iniciando así su narrativa: “Voy a contarles mi historia… y no es fácil para mi… pero es importante decirla y es importante que la escuchen…”

     ¡Esos momentos no los olvidaré! Ni tampoco me los quedaré solo para mí. Después de que Ida terminó, nos dijo que nos tenía preparada una comida, y que lo hacía porque para ella es muy importante que personas como nosotros sigamos mostrando interés y amor a los sobrevi-vientes del holocausto, y nos sorprendió con una comida muy generosa y deliciosa, donde pasamos un rato maravilloso en un ambiente de alegría y nostalgia a la vez. ¡Am Israel Chai!

     Debido a la falta de espacio, tengo que terminar de escribir hasta aquí, pero creo que con esto, pueden darse una idea de algunas de las muchísimas actividades de ayuda humanitaria que se realizan en Joseph Project durante todo el año en todo el territorio de Israel. Contamos en esta obra de amor al prójimo con personal de planta, camiones y un gran almacén (también con personas con el amor de D-os en sus corazones capaces de extender su mano al necesitado).

     Fue maravilloso ver como esos ojitos tristes que vi al llegar a cada una de las citas que programamos, vi también cómo se iban transformando en alegría al saber que D-os no se había olvidado de ellos, y que gracias a personas generosas que nos ayudan con recursos financieros, es que juntos podemos llevar esperanza de un mejor futuro a quienes tanta necesidad tienen. Pero sobre todo, que el amor de D-os se manifiesta a través de nuestro amor al prójimo.

“No nos cansemos, pues, de hacer bien; porque a su tiempo segaremos, si no desmayamos” (Gálatas 6:9).

Shalom!

Para mayor información www.josephproject.org

Myriam Levy-Chernoff: es presidenta de la AJMM y vice-presidenta de la IMJA

Email: mlevys@hotmail.com