Yolanda Guzik

En primer lugar queremos dar gracias a D-os por su amor, fidelidad y provisión, por la oportunidad que tuvimos hace unas semanas de celebrar los primeros veinticinco años de la sinagoga mesiánica «Yeshua Ben David» de la ciudad de Guadalajara.Èl es el que nos ha dado la perseverancia y nos ha ayudado a no perder el rumbo y objetivo.

Nuestro llamado ha sido muy claro desde el principio: ser el lugar donde puedan congregarse aquellos judíos de la ciudad de Guadalajara que andan en la búsqueda de la verdad, ser también un lugar fraternal para los que ya han reconocido en Yeshua (Jesús) al Mesías de Israel anunciado por los profetas. Una sinagoga donde puedan adorar juntos al Señor y crecer en el conocimiento de la Palabra, en la fe y en el amor, pero eso sí, sin perder nunca la identidad judía, pues no dejamos jamàs de celebrar las fiestas y tradiciones milenarias que nos han dado identidad y cohesión como pueblo durante tantas generaciones.

Gracias a D-os por la vida de nuestro rabino (Maestro en Teología) Manuel Hernández Gómez, quien respondió al llamado que D-os le hizo y fue así como el18 de abril de 1987 la Sinagoga Mesiánica Yeshua Ben David celebró su primer shabat y desde entonces a la fecha jamás hemos dejado de reunirnos. Como todo en la vida, hemos tenido tiempos de tristeza y tiempos de grandes alegrías, de logros y sueños rotos. Hay tantas historias que contar en estos 25 años: se han celebrado bodas, nacimientos, funerales, bar y bat mitzvah, pidiòn habèn, etc. Algunos miembros de la sinagoga se han marchado a vivir a Estados Unidos y otros más han tenido el gozo de hacer aliyá. Algo importante de contar, es que la AJMM nació de esta sinagoga. También quiero decirles que Yeshua Ben David es la única sinagoga mesiánica en todo el país.

Sobre todas las cosas, hemos tenido el gozo de ser testigos en muchas ocasiones, del momento en que otro judío ha entendido la Biblia y al reconocer al Mesìas en las Escrituras ha entregado su corazón a Yeshua. Creo que han sido momentos inolvidables. También hemos tenido el gozo de ver nacer, crecer y desarrollarse a una nueva generación de judíos mesiánicos mexicanos, niños y jóvenes que aman a D-os, que aman a su pueblo, que conocen nuestra historia y que aman Eretz Israel (algunos incluso ya han estado por algún tiempo o visitaràn pronto Israel). Asì que está historia continuará escribiéndose hasta que el Señor Yeshua retorne. Y así como dijo Samuel al pueblo nosotros también podemos decir: “Hasta aquí nos ayudó el Señor”. (1Samuel 7:12).